El dinero recaudado irá para un proyecto de defensa del ecosistema manglar
Íñigo Arrúe | Valladolid
Tras años de malas noticias y peores augurios sobre su ecosistema, la comunidad ecuatoriana de Olmedo, bañada por el Pacífico, recibirá de manos de Valladolid una refrescante oleada de solidaridad para resistir en su lucha contra la empresa de langostinos Purocongo SA, que ha devastado la zona en todos ámbitos: económico, medioambiental y hasta en la propia salud de los habitantes.
Leandro Velasco, profesor de La Salle y miembro de la ONG PROYDE, impulsora del proyecto solidario, se ha mostrado confiado de que el dinero y el apoyo que llegará a la Reserva de Majagual, será un espaldarazo en la lucha que mantiene la población contra la empresa del langostino tropical.
Aunque es el tercer proyecto que abraza PROYDE –antes fueron la zona de Suranam (India) y Meki (Etiopía)–, el de Ecuador cuenta por primera vez con la gran baza del rastrillo como fuente de ingresos. Y más en concreto porque destacados artistas locales han donado desinteresadamente sus obras para la causa. No en vano el proyecto ya se ha bautizado como el de 9.000 motivos, que es el equivalente en euros que esperan recolectar para Ecuador.
Pintores como Manuel Sierra, Miguel Ángel Soria, Juan Carlos Luque, Montse Motos, Miguel Luengo, Jesús Martínez (Ostern), Lorenza Gutiérrez y la viuda del pintor Domingo Criado, (María José Pérez) han aportado lienzos. También participa el escritor José González Torices, la escritora Araceli Simón, el editor Eduardo Fraile, Celtas Cortos y los fotógrafos Luis Laforga y Ángel Marcos, sin olvidar la aportación de la Fundación Joaquín Díaz y el Ayuntamiento y Diputación de Valladolid.
Algunas piezas, como una camiseta y un CD firmados por los Celtas Cortos, saldrán a la venta por medio de un sorteo, debido a la demanda de la chavalería. No será, en cualquier caso, el único frente de cuestación. El director Álvaro Pérez anunció también que el 7 de junio celebrarán una marcha solidaria de PROYDE en la Santa Espina, sin olvidar los magostos, las rifas y las ventas de camisetas. Como reza el lema del colegio, "Lumen La Salla", cuando se ponen a pensar un plan, lo bordan.
Y el profesor Velasco recordó que el caso de Olmedo no merece menos. La industria del camarón ha aniquilado la pesca artesanal de los habitantes de Olmedo, principal sustento económico de la zona, por los vertidos tóxicos; ha degradado el bosque de manglar, tratándose de un reducto que acoge los mayores ejemplares del mundo –hasta 60 metros de altura– e, incluso, ha desviado cauces de río para crear piscinas dejando secas las grandes raíces de los manglares. "Pienso regresar a Olmedo y llevarles el dinero y los recortes de prensa que se han publicado en Valladolid para que sepan que no están solos", afirmó Velasco, que ya ha visitado la zona en cuatro ocasiones, lo que le ha permitido crear un gran reportaje fotográfico de la zona devastada que puede contemplarse en la biblioteca de La Salle, el espacio que acoge el mercadillo hasta el martes, inclusive.
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